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Entrevista Portalera con Ivonne Corona Morales, Jefa de Turismo
Charlamos sin previo plan en una mesa del Bunte, al amparo del portal bullicioso, reunidos por los buenos oficios de Parménides Ortiz en el último día de descanso de la titulada en Artes Escénicas Ivonne Corona Morales, jefa de Turismo de la comuna capitalina.
“Son mis primeras vacaciones desde que comenzó la administración, empezaron el viernes”, nos comparte mientras mira unos gráficos en su laptop, sobre turismo naturalmente. Contienen su reporte de la evolución de la actividad durante 2011.
-¿Entraron en el informe que dio Pérez Lira en el teatro del IMSS el pasado diciembre?
-No exactamente; de hecho, nada… –lamenta tras un mohín, entre veras y bromas.
Ivonne Corona habla con apasionamiento de su encomienda, de los atractivos de Tlaxcala y, sobre todo, de un quehacer a contracorriente en favor de la industria sin chimeneas.
-He luchado a brazo partido para lograr que Turismo sea una dirección municipal, y no como ahora, un departamento de Desarrollo Económico –revela un poquito desesperanzada.
Apatía de los empresarios del ramo, negligencia de los prestadores de diversos servicios a los visitantes, descoordinación entre el gobernador y los alcaldes. Una carrera de obstáculos, la labor que describe Ivonne Corona.
Ejemplifica con los taxistas, principales invitados al curso de capacitación para prestadores de servicios turísticos que recién ha concluido la comuna capitalina.
-¿Sabes cuántos taxistas asistieron? Ninguno. Porque ellos son nuestra cara de presentación, deben capacitarse en cuestiones de imagen personal, trato, un vocabulario básico del inglés. ¡Ellos son los que reciben a los turistas! –exclama desesperada.
Critica además una actitud negligente de los concesionarios de placas, al advertir que “aquí es el único lugar donde la gente va y los busca a la base, porque si no, no se mueven”.
-Los gobernantes comparten una idea fija: la industrialización. ¿No habrá una ruta más corta, un rodeo más productivo y con menos daños al ambiente, precisamente en el turismo? –planteamos.
-Soy una convencida de eso –concede. Recapitula que la entidad alberga más fiestas que días tiene el año. Precisamente hoy empezó la celebración de la Araña en Tocatlán; y Huamantla ya está a punto para desvelarse en La noche que nadie duerme.
Torna enseguida Corona a la descripción de las carencias: capacidad hotelera muy reducida, estándares de calidad insuficientes para lo que los turistas nacionales y extranjeros demandan, mentalidad conformista de los empresarios del ramo, y así un largo etcétera.
“El desarrollo turístico es un trabajo en conjunto entre el estado y el municipio; además, los empresarios turísticos están muy divididos. ¡Debemos estar muy unidos!”, postula enfáticamente la guapa funcionaria.
Entretanto Ivonne Corona hace lo que puede.
Una encuesta en marcha indaga entre los visitantes su origen, lugar de hospedamiento, tiempo de estancia, edades y ga Aplicar stos, impacto de los atractivos, conducto de información sobre la entidad, transporte y otras variables.
Antes de la feria principal de octubre, durante el 487 aniversario de la fundación de la capital de Tlaxcala, Turismo municipal distribuirá 42 mil mapas turísticos a todo color. Su diseño “sorprenderá a muchos”, promete Corona.
En derredor de la mesa de Parménides saludamos a Max, el director de El Sol, y un renovado Melecio Domínguez, el joven político de Zacatelco.
Una plancha de calor es el portal al mediodía de este martes nublado.
Consuela saber que Tlaxcala es una sola fiesta. La cita es esta misma noche en el nombre nativo de las arboladas, Huamantla.