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Las Armas de Dilma Contra su Degollamiento
Versión en español del original portugués “As armas de Dilma para escapar de Dagola”, por Xavier Quiñones para Código Tlaxcala
Sería una exageración decir que Dilma cuenta con dos armas poderosas para ayudarle a derrotar la aceptación del juicio político en el Senado. Pero, después de todo, son dos brazos en los que ha puesto su fe. Son las únicas, de momento, de las que imagina que puede disponer.
La primera: Renan Calheiros (PMDB-AL), el todopoderoso presidente del Senado. Es cierto que responde siete preguntas en el Tribunal Supremo (STF), más de las que responde Eduardo Cunha (PMDB-RJ). Sin embargo… nadie se preocupa de eso.
¿Quién sabe si Renan, al que no le gusta Temer, al que tampoco él le gusta; quién sabe si Renan no utiliza toda su influencia para salvar a Dilma? ¿Qué ganaría él? Lo que pidiese, ahora. La pregunta es si Renan prefiere pedir a Temer o pedir a Dilma.
La segunda arma de Dilma: la ministra de Agricultura Katia Abreu. Puede ser, es creíble. Katia también es senadora. Y Dilma está pensando en despacharla de vuelta al Senado, donde cosería apoyos contra el impeachment.
Es cierto que Katie sólo consiguió un voto contra el impeachment en la Cámara: el de su hijo Irajá Abreu (PSD- A). ¿Pero quién sabe si en el Senado no tendrá más éxito? Katia es muy querida entre los senadores. En el pasado, fue muy querida por Temer.
Hablando, ayer, con amigos en Sao Paulo, Lula tiró la toalla. No cree en la chance de que el Senado recuse juzgar a Dilma. Y si no se niega, simplemente el final del destino de Dilma está sellado -derogación de sus derechos políticos y del mandato.
Si Renan no halla una forma, si Katya tampoco, restará a Dilma una última esperanza: la disposición innegable, hasta el momento, del ministro Ricardo Lewandowski, presidente del Supremo Tribunal Federal (STF), de ayudarla. Es él quien presidirá el juicio en el Senado como manda la ley.
En socorro de Dilma, volvió a repetir, ayer, que si el gobierno presenta una apelación ante el STF, correspondería al pleno decidir si analizará o no los méritos del proceso de impeachment en contra de la presidenta. El gobierno tiene la intención de apelar, sí.
Lewandowski se siente deudor de Lula y en especial de la señora Marisa, mujer de Lula. Fue porque lo respaldó ella que su nombre llegó a ser examinado por el Presidente de la República como candidato a una vacante de ministro en la Corte Suprema. Lo acabó siendo.
En el juicio de los mensajeros (1), Lewandowski hizo lo que pudo para suavizar las penas de varios de ellos. Aunque tropezó con el ministro Joaquim Barbosa, entonces presidente de la Corte Suprema. A lo que ahora aspira es a intercambiar la corte por otro buen trabajo. Una embajada, tal vez.
Si sobreviviera en el cargo, Rousseff, sin duda, tendría todo esto en cuenta.
—fin.
1 (NT) Juicio llevado por el Tribunal Supremo entre 2013 y 2014 -antecedente del proceso de Dilma- contra intermediarios de una trama de sobornos a parlamentarios para la aprobación de proyectos de gobierno, en cuya realización a comienzos del gobierno de Lula se emplearon facturas falsas y malversaron fondos públicos.
http://g1.globo.com/politica/mensalao/noticia/2014/03/apos-um-ano-e-meio-e-69-sessoes-stf-conclui-julgamento-do-mensalao.html