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Kuczynski en la Fosa Odebrecht

Fausto Pretelin /El Economista (México), 19 Dic

El mito del buen tecnócrata está llegando a su fin con la caída del presidente Pedro Pablo Kuczynski (PPK) en la fosa llamada Odebrecht.

De rasgos polivalentes: economista, músico y presidente, PPK recibió una educación universitaria privilegiada al pasar por los salones de clases de Oxford y Princeton. Reconocido por muchos como “gringo criollo”, Kuczynski logró frenar el regreso al poder del clan Fujimori, hace poco más de un año, con tan sólo 40,000 votos de diferencia. Pero también se recuerda el apoyo financiero que le brindó a Keiko Fujimori para que lograra cerrarle el paso a Ollanta Humala, escenario que no ocurrió porque la hija del dictador Fujimori perdió las elecciones en el 2011.

“Odebrecht” es una palabra polisémica; es “fosa”, pero también es “huracán grado cinco”. A su paso nada queda de pie. Kuczynski lo sabe. Odebrecht mantiene prófugo a Alejandro Toledo; investiga a Alan García, y mantiene en la cárcel a Ollanta Humala. Todos expresidentes.

Con 79 años, PPK quisiera viajar al pasado, entre el 2004 y 2013, para tratar de imaginar el futuro de la constructora Odebrecht; para intuir lo que sería el hundimiento de la brasileña en el océano del desprestigio, y junto a ella, un ejército de servidores públicos. ¿Cómo regresar en el tiempo para borrar esos 5 millones de dólares depositados por Odebrecht en las cuentas financieras de sus empresas?

Es posible que PPK no haya recibido un solo dólar ilegal por parte de Odebrecht. Pero poco importa en el entorno brutal y actual de la constructora. Así lo explicó el domingo el propio presidente peruano, al decir que él se desligó de su empresa de banca de inversión cuando ocupó el puesto de ministro durante el gobierno de Alejandro Toledo (2004-2006), y que no conocía los contratos que firmó Gerardo Sepúlveda, el administrador de su empresa, con Odebrecht en aquella época.

Lo que sí reconoció PPK fue haber recibido dividendos del negocio.

En la anarquía de la transparencia y en la dictadura de las redes sociales, no caben explicaciones o justificaciones de los políticos porque ya son un genérico, el de la corrupción.

En 1995, PPK registró dos empresas, Westfield Capital y Westfield Financial Advisors; en 1998, Latin America Enterprise Fund Managers; en el 2006, Florida Bayshore Proper Ties. El hoy presidente peruano ha esbozado su carrera con múltiples cruceros y vías rápidas que cubren dos continentes, la política y los negocios.

Ahora, PPK está enredado.

Kuczynski emigró de Perú en dos ocasiones tras haber trabajado en la administración pública. La primera fue en 1968, acusado por el gobierno militar de entregar dinero como gerente del Banco Central a la International Petroleum Company (IPC) cuando ésta ya había sido nacionalizada.

PPK regresó a Perú en 1980 como ministro de Energía, su especialidad, pero regresó a Estados Unidos dos años después por amenaza de muerte.

Kuczynski está casado en segundas nupcias con la estadounidense Nancy Ann Lange, prima de la famosa actriz Jessica Lange; su madre, Madeleine Godard, fue tía del director de cine Jean-Luc Godard, uno de los miembros más brillantes de la nouvelle vague.

Ahora, es Kuczynski quien vive en el interior de una película de terror.

Antes de que termine el año, podría abandonar la Presidencia por “incapacidad moral”.

Link  https://www.eleconomista.com.mx/opinion/Kuczynski-en-la-fosa-Odebrecht-20171219-0003.html

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