Anabel y el PRI enfrentan un gran reto: demostrar que no hay invencibles

Tuvo que pasar más de un año para que la oposición diera señales de que en Tlaxcala, hay un partido que puede ser un contrapeso al partido en el poder, ¿Por qué digo esto? porque el nombramiento de Anabel Avalos Zempoalteca, como Presidenta del Comité Directivo Estatal del PRI, abrió expectativas  de participación  partidista, ya que el PRI,  entra  en una nueva etapa, donde   la ex candidata al gobierno del estado, enfrentará grandes retos, el primero; ser oposición a varios de sus ex corregionarios que se formaron en el partido tricolor, segundo; ser oposición de un partido con un discurso populista y hasta cierto punto demagógico, tercero; acabar con los mitos de que hay priistas intocables y cuarto; echar andar una maquinaria dormida o sumisa, y me refiero a los sectores: popular, obrero y campesino, Anabel  encontró  un partido casi moribundo,  muy dividido y  sin estructuras, sin  un líder quien asuma la responsabilidad de recomponer y unir los grupos que siguen siendo fieles al priismo,  de ahí que el gran reto de Anabel Avalos, es unir, pero sin soberbia, ella  es una mujer que sabe hacer política de tierra, es buena operadora política y no es partidaria de la confrontación política, aunque es esta etapa como dirigente de un partido de oposición, sí tiene la obligación de señalar errores y de hacer sugerencias para que el gobierno en el  poder no caiga en el autoritarismo y en los excesos.

Para la clase política estatal, la asunción de Avalos Zempoalteca, como dirigente de un partido casi en extinción, es un gran reto, ya que muchos de sus partidarios, hoy son flamantes funcionarios públicos o líderes de Morena, y quienes  olvidando su pasado hoy  son los enemigos de un partido que los formó, les dio posición política y hasta una gran posición económica, nombres se los dejo a usted señor lector, nada más es cosa de revisar las nóminas gubernamentales y podrá encontrar los nombres de políticos y familiares,  que algún día juraban y perjuraban ser fieles al priismo, aunque los tiempos y los intereses cambian, de ahí que la nueva líder tendrá que hacer un trabajo fino, para reorganizar a un partido que si bien esta desmantelado, no está muerto, principalmente porque los ex priistas que hoy son gobierno han adoptado una actitud de prepotencia y  perdonavidas, como olvidar el revanchismo político al inicio del gobierno Morenista, donde cientos de trabajadores fueron literalmente corridos de sus trabajos, sin respetarles sus derechos laborales y sin un finiquito decoroso,  muchos con más de 20 años de trabajar como servidores públicos, hoy son desempleados  y con  familias que viven sin trabajo y que no tienen quien les apoye, al menos moralmente y Anabel lo sabe, de ahí que para una mujer que sabe caminar y polvearse los zapatos, seguramente no le será difícil reorganizar a miles de Tlaxcaltecas, que ven como el poder y el dinero sólo es para unas cuantas familias, y para gente que esta en el poder, aunque muchos  son funcionarios sin experiencia, y sin con muchos vicios de corrupción como el Director General del COBAT, el tal Darwin Pérez Pérez.

Hoy el gran reto de la líder priista, será ganarse la confianza de la sociedad tlaxcalteca, con una actitud de respeto sin discursos demagógicos y sin promesas, es hora  sumar a miles de  jóvenes que por décadas solo han sido utilizados, ya que son gente preparada y pensante, que ya no se dejan engañar con discursos populistas y fascistas, y un ejemplo claro fue la marcha en defensa del INE, donde los jóvenes fueron los actores principales, sin acarreos y sin condicionamientos, lo que debe valorar Avalos Zempoalteca, quien con su experiencia debe convocar a miles de priistas tlaxcaltecas, que solo están esperando sean convocados y  organizados, la tarea sin duda no será nada fácil, hay  intereses personales y de grupos que por décadas utilizaron al PRI, sólo para tener poder y dinero, hoy el reto es crear estructuras de jóvenes en todo el estado, aprovechar la experiencia de priistas que han estado con su partido en las buenas y en las malas, pero principalmente no olvidar a los campesinos que sólo son utilizados en los procesos electorales y luego son olvidados, como paso hace unas semanas donde la gente del campo fue ignorada de su seguro, a los obreros que por décadas han padecido el cacicazgo de sus líderes quienes se venden al mejor postor, un sector muy importante son los  miles de maestros que no comulgan con el populismo y con el oficialismo, y que sólo esperan ser convocados para participar políticamente.

Ante esta nueva coyuntura, al priismo sólo le queda organizarse, crear estructuras y no caer en los viejos vicios que lo llevaron casi a desaparecer, ya no más imposiciones, no más venta de candidaturas o que estas sean para  hijos o familiares de priistas de alcurnia, el gran reto de Anabel, es restructurar al PRI, con gente nueva, con gente del pueblo  que ha demostrado estar en las buenas y en las malas con el tricolor, en política no hay invencibles y es la rueda de la fortuna, si no al tiempo.