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AMLO Recibe Constancia del TEPF y ya es Presidente Electo

‘Voy a Cumplir Todos los Compromisos de Campaña, Prioridad a los Olvidados’, Ratifica

En México hay Desde Porfiriato ‘Simulación de la ley’, Remarca Ante Funcionarios Judiciales

Fin Último de Instituciones es ‘una Democracia Cómo Sistema de Vida’: Otálora Malassis

Al recibir este miércoles de manos del Tribunal Electoral (TEPJF) la constancia que lo acredita como presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador ratificó que “cumpliré todos mis compromisos de campaña, no les voy a fallar a los ciudadanos”; e insistió en que si bien “el gobierno debe representar a todos”, el suyo dará “prioridad a los olvidados y los más pobres”.

“Millones de mexicanos aspiran a vivir en una sociedad mejor, sin la monstruosa desigualdad económica y social que padecemos”, sostuvo ante un auditorio a ratos tenso integrado por algunos funcionarios privilegiados.

Al comienzo de su mensaje de catorce minutos, AMLO rindió homenaje a luchadores sociales “que se nos adelantaron y están en la gloria, porque el infierno no existe para los que luchan por la justicia”; y “antes que nada al pueblo, por su evidente vocación democrática”.

“El saldo más importante de la pasada elección” –sostuvo- “fue la demostración de la elevada conciencia cívica y la sólida dignidad republicana que hemos alcanzado los mexicanos.”

Empeñado en hacer elogio de la democracia, López –quien captó alrededor de 30 millones de poco más de 53 millones de votos- pidió a los presentes “asimilar correctamente los sentimientos expresados por el pueblo, y ser ejecutores escrupulosos y fieles de ese mandato”.

Puesto a interpretar su magnífica victoria en las urnas, el presidente electo consideró “que la gente votó por un gobierno honrado y justo”.

“En mi interpretación, la mayoría de los ciudadanos mexicanos están hartos de la prepotencia, del influyentismo, de la deshonestidad, de la ineficiencia, y desean con toda el alma poner fin a la corrupción y la impunidad”.

Con respecto al principal problema de México, la inseguridad, apuntó que “otro de los mandatos de la mayoría es evitar la violencia, atendiendo para ello las causas que la originan; y reformular la política de seguridad hoy centrada exclusivamente en el uso de la fuerza, a fin de construir la reconciliación nacional sobre el bienestar y la justicia”.

Ante Luis María Aguilar Morales, magistrado-presidente de la Suprema Corte (SCJN); Lorenzo Córdova Vainello, consejero-presidente del Instituto Electoral (INE), y la magistrada-presidenta del Tribunal Electoral, Janine Otálora, López Obrador remarcó lo que llamó “una lección del 1 de julio con destinatario a los políticos y servidores públicos, es decir, a nosotros mismos”.

“La gente votó para que exista en México un verdadero estado de derecho, el pueblo quiere legalidad, no la simulación que en la aplicación de la ley ha persistido desde el porfiriato. La gente votó también, para que se ponga fin a las imposiciones y los fraudes electorales, quieren castigo por igual para políticos corruptos y para delincuentes comunes o de cuello blanco.”

“La ciudadanía plasmó en su sufragio, que los encargados de impartir justicia no actúen por consigna, y que tengan el arrojo de sentirse libres para aplicar sin cortapisas ni servilismos el principio de que al margen de la ley nada ni por encima de la ley nadie.”

En el ambiente formal de la sesión solemne, López ofreció a magistrados y visitadores el compromiso del próximo presidente de no “entrometerme de ninguna manera en las resoluciones que solamente a ustedes competen”. “Ni palomas mensajeras ni halcones amenazantes, habrá absoluto respeto a sus dictámenes”, les insistió.

Asimismo, invitó a crear en México una República genuina, basada en una separación real de los tres poderes.

“El Ejecutivo no será más el poder de los poderes ni buscará someter a otros poderes. Cada quien actuará en el ámbito de su competencia y la suma de los trabajos respetuosos e independientes fortalecerá la república, y el estado democrático de derecho transitará del ideal a la realidad.”

Hacia el final de su discurso, López Orador pidió nunca olvidar “que debemos estos nuevos horizontes al pueblo soberano que está por encima de individuos, grupos o facciones por poderosos que sean o que parezcan”.

“Así como el autoritarismo y la abyección envilecen y desprestigian a las instituciones”, remató en alusión a la elección del 1 de julio, así “la voluntad democrática de la ciudadanía puede renovarlas y fortalecerlas”.

MENSAJE DE OTÁLORA

En su mensaje previo de dieciséis minutos, Otálora Malassis refirió que “después de haber realizado tres ejercicios de calificación de la elección presidencial, el Tribunal Electoral ha contribuido a restablecer la quebrantada esperanza en la soberanía del pueblo y en la posibilidad del imperio del Derecho”.

“Es un honor que como representantes de las instituciones que construyen a este país, ustedes sean testigos de este momento histórico”, agregó; y luego recordó a los presentes que el fin último de las instituciones “no es tener una democracia como mera estructura jurídica y régimen político, sino como un sistema de vida”.

En clara concordancia con López Obrador, la presidenta del TEPJF puso un énfasis especial en la obligación de las instituciones de garantizar la libertad de los ciudadanos a través de la vigencia de los derechos individuales o humanos en concordancia con los más avanzados acuerdos y tratados internacionales.

Al cabo de la sesión, López Obrador saludó de manos a algunos magistrados del TEPJF y a los ocupantes de las primeras filas, donde fue correspondido con nerviosa frialdad por Lorenzo Córdova, el titular del INE.

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